miércoles, 28 de agosto de 2013

HABLEMOS DE SEXO: EL JUEGO ERÓTICO. DEL DESEO A LA SEDUCCIÓN

HABLEMOS DE SEXO: 
EL JUEGO ERÓTICO. DEL DESEO A LA SEDUCCIÓN



Se acaba el verano y en vista de las múltiples preguntas que me habéis hecho sobre este nuevo espacio, "Hablemos de sexo", sigo mi camino escribiendo sobre este tema que parece ser, os interesa tanto.
Septiembre llega y aunque se vayan los calores y esas ganas locas de salir y entrar  de la rutina, no tenemos por qué salir de ella porque llegue el otoño.
Así que hoy voy a escribir sobre el juego erótico, me acompañas?.

Ya hace muchos años, por suerte, que sabemos que la sexualidad no solo es copulación.
En torno al acto sexual se funden una serie de juegos eróticos que despiertan los placeres de los sentidos, es el ritual del amor que se inicia con el deseo sexual y sigue con gestos y miradas hasta llegar al beso y las caricias más íntimas.
Es el juego erótico, el juego de la vida.

PERO, QUÉ ES EL DESEO?
Es el motor que lleva a las personas a unirse sexualmente.
Hombre y mujer tenemos unas hormonas encargadas de provocar la motivación sexual.
Es un impulso natural que una vez satisfecho produce sensaciones de felicidad y relajación.
Una de las preguntas que me ha llegado era de una mujer que me preguntaba si el deseo era imprescindible en una relación sexual.
 A esto diré que el deseo es imprescindible para conseguir la excitación y tener una relación sexual placentera y por ello debe considerarse fundamental en la relación de pareja. Si bien es verdad que existen relaciones sexuales sin deseo, pero en ese caso habría que preguntarse que me está pasando a mi o a la relación de pareja para que haya desaparecido el deseo, es lo que los sexólogos llamamos IDS (inhibición del deseo sexual).

A QUÉ EDAD HAY MAYOR DESEO?
En asuntos del sexo no hay ninguna norma fija y los condicionantes físicos, emocionales, psicológicos y culturales de cada persona marcaran su apetito y respuesta sexual.
Aunque diversas investigaciones han constatado que la mujer alcanza la cumbre del deseo entre los 30-40 años mientras los hombres sienten la máxima necesidad entre los 17-20 años aproximadamente.
Muchas personas vienen a mi consulta y me piden algún "elixir" para potenciar el deseo sexual, que se ha ido de vacaciones sin su permiso y siempre les contesto lo mismo, el mayor elixir es estar enamorado...y en eso, no existe edad alguna. Tengo pacientes de avanzada edad que tienen una sexualidad activa y placentera y eso constata que el deseo no sabe de fechas de nacimiento.
También he recibido preguntas sobre el deseo en la menopausia, periodo que preocupa a muchas mujeres.
Os cuento que algunas mujeres entre los 40-50 años se notan más ardientes y dicen tener "más ganas" que cuando eran jovencitas. Todo tiene un curioso origen físico: como sabéis hombres y mujeres tenemos hormonas masculinas y femeninas a la vez. El hombre más de masculinas y la mujer más de femeninas.
La hormona masculina, la Tetosterona, es una potenciadora de la líbido (deseo). Las hormonas femeninas, en especial la Progesterona, producida en la función ovárica, son inhibidoras del deseo.
Al llegar la menopausia dejan de funcionar los ovarios y caen los niveles de hormonas femeninas y sin embargo seguimos produciendo hormonas masculinas.
Eso aumenta el deseo sexual.

¿Y CUANDO EL DESEO BRILLA POR SU AUSENCIA?
Hay mujeres que a veces se hacen esta pregunta "¿me habré vuelto frígida?", sobre todo cuando los días en que nos encontramos "frías" se convierten en una larga temporada.
Siempre hay que buscar el origen de esa falta de deseo, tanto en el hombre como en la mujer.
La ausencia de deseo TOTAL en algunas mujeres suele tener sus raíces en sentimientos de culpa con una educación estricta o con unas primeras experiencias sexuales desagradables o frustrantes. Además, el deseo sexual en la mujer tiene fluctuaciones, como puede ser la ovulación, el síndrome premenstrual o la menstruación.

¿INFLUYE EN EL DESEO LOS ASPECTOS FÍSICOS O EMOCIONALES ?
¡¡Claro!!!. Enemigos del deseo por excelencia, son el estrés, los conflictos laborales o familiares, algunas enfermedades y bastantes fármacos que, a veces, tomamos a la ligera: tranquilizantes, antidepresivos,etc.
Es esencial aquí la propia dinámica de la pareja, a veces, los enfados, carencias emocionales, desatención, ansiedad o el miedo, provocan que las personas no respondamos sexualmente.
Hay que ser honesto con uno mismo y con la pareja y hablar claramente de lo que nos está pasando, el desamor mata el deseo sexual de cuajo y hay que descartar ya esa frase tan común de "hoy no, que me duele la cabeza" o "déjame, estoy estresado", si no es verdad.
Así que un dialogo abierto y sincero con el otro miembro de la pareja, junto con nuevas fantasías, encuentros románticos o nuevas posturas que rompan la rutina curarán todos los males.
No olvidemos que es importante que la pareja tenga un espacio llamado "nosotros" donde no caben niños ni facturas. Y ese espacio de atención a la relación hará que la pareja se siente atendida, querida y deseada.
Hablemos de lo que sentimos, de lo que nos pasa por dentro, solo así el otro miembro no tendrá que jugar a la adivinanzas y sabrá que va mal o que va bien (eso también es necesario decirlo para reafirmar la relación).
Y si el desamor ya ha llegado a la vida de pareja, y si incluso ya existe una tercera persona donde proyectamos nuestras fantasías sexuales, seamos valientes con nosotros mismos y con el otro y analicemos la realidad con responsabilidad.

¿Y QUE PASA CUANDO HAY UN EXCESIVO DESEO SEXUAL?
¿ES PERJUDICIAL?
Un exceso de deseo no perjudica al estado general de la pareja, todo lo contrario, a no ser que solo lo tenga uno de los dos y el otro se sienta exigido y apremiado.
Todo puede considerarse correcto mientras no se convierta en una obsesión fija y permanente que no puede calmarse ni con una intensa actividad sexual.
Si se vuelve enfermizo nos encontraríamos ante un caso de Ninfomanía en la mujer y Satirismo en el hombre, que requeriría tratamiento.

¿QUÉ ES EL JUEGO ERÓTICO?
Como decía al principio sexualidad no es solo el acto sexual.
Una sexualidad plena está llena de sensualidad, de todo aquello que despierta nuestras emociones y sensaciones y nos hacen vibrar: miradas, caricias, mimos,besos...
Es el juego de seducir o dejarse seducir, un juego que enriquece nuestra capacidad de expresarnos y de amar.
Un juego donde no hay normas y donde todos participamos consciente o inconscientemente. Y no solo en casa, si no en el trabajo, en bares, en discotecas,etc.

LA VESTIMENTA. ¿ARMA DE SEDUCCIÓN?
Lo que más información nos da sobre cómo es una persona con una simple mirada (aunque sea superficialmente), es su forma de vestir y por supuesto es un arma de seducción, a veces, sin saberlo..
La vestimenta indica una determinada posición muchas veces del e estatus y tiene también su lenguaje propio, incluido el sexual.
El vestido ya no es solo una prenda de protección y de pudor. Es también un adorno y un objeto de comunicación.
Seguro que tú te sientes mejor con un determinado tipo de ropa y con unos colores mejor que con otros. Nos sentimos más seguros.
La persona, cuando sale y se arregla de una forma determinada y se pone una prenda concreta, está diciéndoles a los demás más cosas de lo que muchas veces imaginas.

EL LENGUAJE DEL CUERPO: LA MIRADA
En el gran juego erótico de la seducción la mirada es el primer contacto.
Ya habrás comprobado mas de una vez el inmenso poder de comunicación que tienen los ojos.
Muchas veces las palabras pueden mentir. La mirada no.
¿No te ha hecho temblar alguna vez una mirada?
A veces para bien, a veces para mal.
Pero en la seducción la mirada es importantisima.
Simplemente controlando el lenguaje de los ojos se puede aceptar o rechazar el juego de seducir o ser seducido.

LA PALABRA
Primero como va vestido, luego su mirada...pero dos personas necesitan hablar antes de entablar una relación sexual.
Su vestimenta y su aspecto físico harán que sintamos curiosidad y con la mirada mostramos nuestra aceptación. Pero será a través del dialogo, la palabra, como sabremos sus gustos y aficiones, trasmitiremos nuestras ideas y sentimientos.
Incluso cuando llegamos cansados del trabajo a casa y está nuestra pareja, es importante comunicarnos y expresarnos.

EL BESO
Que sería del juego erótico sin el beso...
El beso boca a boca es el primer contacto sexual de verdad.
La lengua aquí juega un papel muy importante porque tiene muchas terminaciones nerviosas que estimulan al cerebro y de allí, los órganos sexuales.
Cuando una pareja deja de besarse y solo se da "picos", seguro que algo pasa.
Así que besa...no dejes de hacerlo...tú sabes que existen besos que te derriten por dentro...

LAS CARICIAS 
Importantísimas. Los preliminares sexuales son la puerta imprescindible para una relación satisfactoria.
Todo un juego de caricias, gestos y mimos que avivan nuestro deseo y provocan una excitación más intensa.
Muchas parejas se olvidan de las caricias o las reducen al mínimo tras años de convivencia.
Gran error, las caricias nunca deben dejarse de lado o pensar que el coito es lo más importante.
Precisamente en terapia de pareja es una de las quejas más comunes en las mujeres.

EL PRELUDIO SEXUAL
Hay muchas mujeres que opinan que el placer que obtienen en el preludio sexual es más largo, profundo o superior que el acto sexual.
El intenso contacto físico es una de las actividades mas placenteras, no solo corporales, ya que cuando estás enamorado sientes que se une algo más que el cuerpo.
Recuerda que el mayor enemigo de la relación sexual son las prisas, origen, algunas veces, de desilusiones, temores, frustraciones y carencias.
No existen reglas fijas en el preludio sexual. No hay mas norma que la espontaneidad y el respeto mutuo. Todo está permitido siempre que no se imponga algo al otro.
Pedir si, imponer no.

EL AMBIENTE, ESE GRAN OLVIDADO
Una atmósfera adecuada y a nuestro gusto es muy importante, nos envolvemos de ese ambiente que hemos creado para nuestro encuentro...y a veces, solemos olvidarlo.
Propicia la relación sexual, velas, música, un vinito o una copita de cava... y todo aquello que te apetezca crear nos sienta de maravilla. No dejes de hacerlo. Si ya se, los niños,los baños, la cena, la compra, la plancha, las facturas, las preocupaciones...Pero, de vez en cuando, hazlo.
La rutina mata la pasión.

Creo que por hoy he tocado todo aquello que se me ha ocurrido referente al juego erótico: del deseo a la seducción.
Solo deciros que en la década de los 80 se propugnaba el sexo por el sexo. Hoy se redescubren los valores románticos como fundamentales para la relación sexual. El deseo y la seducción del día a día, están de moda.
El preludio erótico permite igualar la excitación de la pareja, su objetivo es la satisfacción mutua donde todos los juegos se pueden pedir, no imponer.
Y no olvidemos nunca que todo nuestro cuerpo, cada porción de nuestra piel, es una zona erógena...no solo los genitales!
Practiquemos esa frase tan conocida y reconocida:
"HAGAMOS EL AMOR Y NO LA GUERRA".

Gracias!